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Creando sus Propias Recetas
que se han servido en el pasado. De este modo, casi puede garantizar que el producto será mejor. (Me doy cuenta de que este consejo puede resultar prematuro si usted está empezando a operar hierbas). ¿Qué procedimiento me da mejor resultado? Por ejemplo, si es aficionado al incienso y encuentra que las variedades combustibles (conos, bloques y palitos) resultan menos espectaculares a la hora de crear el objetivo mágico preciso, prepare una mezcla de incienso no combustible. Si descubre que cuando enciende una vela untada de aceite el resultado es muy satisfactorio, mezcle una serie de aceites. Recuerde: Aunque tales productos realmente contienen energías, son efectivos en la medida en que son capaces de ponemos en un estado de conciencia ritual (consulte el Glosario). ¿Qué modalidades me satisfacen más? Si detesta la idea de llevar un saquito, no hay ninguna razón que le obligue a fabricar uno. Sin embargo, si el hecho de deslizarse dentro de una bañera llena de agua caliente con hierbas aromáticas activa sus poderes, podría decidirse a preparar un saquito protector para el baño o unas sales que sirvan para tal fin.
Las Hierbas A continuación, deberá decidir qué hierbas desea utilizar. Examine las listas de Objetivos Mágicos incluidos en la Parte III: Sustituciones, para descubrir qué clase de hierbas guardan una relación mágica con su objetivo mágico particular. Para lo que aquí se pretende, conviene que haga una lista preliminar de hierbas protectoras. Ahora compruebe sus existencias. Aunque le llevará tiempo, es una buena idea hacer listas de provisiones de hierbas mágicas que posee. Conviene que tenga un pequeño libro de notas cerca de las hierbas. Escriba en una página (o en más páginas si fuera necesario) todas las hierbas y plantas que posee. En otra página, anote todos los aceites. En la tercera página, haga una lista de todo el material de que dispone para la elaboración de las fórmulas: